Creo que no estamos ante una cuestión crematística sino ante una cuestión medioambiental. La pretensión de la UE, obstinada ella, es que se reduzca drásticamente el consumo de bolsas de plástico cuya eliminación por la naturaleza requiere más de un siglo. Un mecanismo previsto para ello es el cobrar las bolsas para favorecer su reutilización y por ende un descenso notable en su consumo. Es fácil "enmascarar" su pago dada su mínima cuantía (no vas a contar 2 ó 5 céntimos, cantidad esta última que es la más habitual) en el precio de venta, pero ello va en contra del objetivo de la UE.
Lo dicho, si Librería Rocafort cobra 2 céntimos por bolsa (no 5 que es lo más frecuente) no es por cicatería ni por ánimo de lucro sino por cumplimiento de una directriz medioambiental, incluso a riesgo de que alguien pueda molestarse por ello. La seriedad del personal de Librería Rocafort y su buen hacer son legendarios, por ello cobran las bolsas (aunque no les guste tener que hacerlo).
Las costumbres cambian y la UE manda; es lo que hay y nos toca amoldarnos a ello.
Saludos cordiales,
cgcsaintdenis