Me ha dado por diseccionar un poco este terrible accidente. Así veo que:
-Paso a nivel bien señalizado (señalización fija y señalización luminosa), en carretera con buena visibilidad (línea recta, y sin obstáculos que entorpezcan la visibilidad) y día de buena visibilidad (sin niebla o similar). Todos ellos factores contrarios a que se produzca un accidente.
-Si hay otros factores que, individualmente o en combinación, pueden ser la causa del accidente: hielo o nieve en la calzada (adherencia disminuida), posible despiste del conductor del camión (inicia tarde la frenada), posible error de estimación de la intensidad de frenado necesaria (dudoso, pues un profesional estima bien qué distancia requiere su vehículo para frenar), posible velocidad excesiva del camión, posible problema técnico en el camión (dudoso, aunque no hay que dejar de considerarlo).
-Mala suerte del conductor del camión de que la frenada no le permite parar el camión, pero tampoco hace que el camión pase el cruce. Por tanto, de los tres posibles resultados, se produce el peor: el camión se queda dentro del cruce.
-Golpe con el primer tren, que seguramente dejó aturdido (como poco) al conductor del camión (el golpe es serio, pues el tren arrastra al camión haciéndolo girar).
-Si el primer golpe no fue mortal, mala suerte para el conductor del camión de que venía un segundo tren (este segundo golpe sí que es, indudablemente, mortal). Por tanto el destino le juega estas dos malas pasadas al conductor: que el camión se pare dentro del cruce, y que llegue un segundo tren (siempre que el primer golpe no fuese el mortal).
-Parece que sí hay fortuna en que los coches del segundo tren no descarrilan, ni son golpeados por los componentes descarrilados del primer tren (estos últimos se van hacia su derecha, lo cual es lógico, pues parece que son los restos del camión los que los golpean, y dicho golpe es en ese sentido). De lo contrario, de haberse metido algún componente del primer tren en la trayectoria del segundo, el accidente seguramente habría tenido consecuencias aún más graves.