Hace algunos años (en concreto, en 1997), publiqué dos artículos en la magnífica revista ASVAFER que editaba la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Valladolid, bajo la dirección de Pedro Pintado Quintana, dedicados a la exportación de material móvil ferroviario, nuevo y de ocasión. No encuentro el texto del artículo dedicado a las locomotoras, por lo que, de momento, adjunto la parte relativa a la exportación de material autopropulsado de ocasión. Evidentemente, desde 1997 han cambiado mucho las cosas, pero puede servir de base de partida.
Este es el texto en cuestión:
EXPORTACIÓN DE AUTOMOTORES DE OCASIÓN
Exportación de automotores de Renfe
Renfe ha sido pionera en la venta de material automotor usado a terceros paises.
La primera venta de la empresa estatal se materializó en 1.979 con el traspaso a los Ferrocarriles Portugueses (C.P.) de quince renqueantes ferrobuses, excedentarios tras la reciente electrificación de diversas líneas de cercanías. Se trata de las composiciones (Motor y Remolque con cabina) Nº 500, 503, 504, 506, 508, 511, 514, 515, 520, 522, 531, 532, 534, 546, 562. En Portugal se numeran los motores 020.751 a 765 y los remolques 000.751 a 765. Puestos en servicio sin sufrir ninguna intervención de importancia, pronto comienzan a dar serios problemas, retirandose la mayoría de ellos en 1.981. en 1.985 tan sólo circulaban tres composiciones que se limitan a realizar circulaciones de escasa entidad, terminando sus días como trenes obreros en la estación de Entroncamento.
No es hasta 1.994 cuando nuevamente vende Renfe material automotor diesel. Se trata de semitrenes TER con destino a Argentina. Fruto de la privatización de la red ferroviaria de este país, los servicios de viajeros son abandonados en su mayoría. Tan sólo en algunas provincias, los gobiernos locales reemprenden el servicio. Los nuevos explotadores ven en la adquisición de material usado de Renfe la posibilidad de mejorar su imagen con vehículos desconocidos en el país.
Son dos las empresas argentinas que adquieren semitrenes TER, los Servicios Ferroviarios Patagonicos (SEFEPA) y la bonaerense Unidad Ejecutora del Programa Ferroviario Provincial (UEPFP). La primera recibe en 1.994 las composiciones TER 597-017 y 597-029. UEPFP por su parte adquiere los trenes 597-004 y 597-018, aunque éste último llegó renumerado como 597-044, debido a que en realidad la UEPFP adquirió el 597-044, pero cuando estaba preparado para embarcar en el puerto de Bilbao sufrió un incendio quedando destruido en este sabotaje, por lo que rápidamente fue sustituido por el 597-018.
La rápida modernización del parque de cercanías originó un importante excedente de unidades, principalmente de las series 436, 437, 438 y su versión modernizada 435. En un intento de encontrar mercados para este material, Renfe envió a los Ferrocarriles Chilenos en 1.993 la unidad 435 compuesta por los coches motores 039 y 040 y el remolque intermedio 020 procedente de la base de Oviedo. Finalmente las pruebas no se materializaron en un pedido de material de este tipo, sin que sepamos que fué de este tren en tierras chilenas (agradeceríamos cualquier información al respecto). Sin embargo, los contactos establecidos no fueron en vano ya que en 1.996 los Ferrocarriles Chilenos, al igual que los argentinos en fase de privatización, adquieren a Renfe cinco unidades de la serie 440 (Nº 440-044, 049, 050, 052, 061) con destino al servicio MetroTren, entre Santiago de Chile y Rancagua. Totalmente modernizadas en los talleres de Valladolid, han recibido los números M 101 a 105.
En la actualidad Renfe mantiene importantes prespectivas exportadoras como es el acuerdo recientemente firmado para la venta de 48 unidades de la serie 440 con destino a las cercanías de Sao Paulo (Brasil). Al igual que las unidades vendidas a Chile, estos trenes serán integramente reformados en los Talleres Generales de Valladolid, en colaboración con la empresa Temoinsa, recibiendo un equipamiento similar a las UT. 470 de Renfe. Asimismo existen prespectivas de venta de material a Argentina, en concreto un lote de cuatro composiciones de automotores diesel de la serie 593 por los que ha mostrado su interés la empresa Ferrocoop Limitada. Está previsto que dichas unidades presten servicio entre las estaciones de Cipolletti y Neuquen, en la provincia de Rio Negro.
Material autopropulsado vendido por FEVE:
La primera exportación de automotores de FEVE se materializó el 4 de Junio de 1.985 al vender un total de 10 automotores Billard y sus respectivos remolques a los Ferrocarriles de Malí. Se trata de los coches motores 2.111, 2.115, 2.118, 2.119, 2.122, 2.123, 2.124, 2.126, 2.129 y 2.131 y de los remolques 5.101, 5.103, 5.104, 5.106, 5.107, 5.108, 5.110, 5.112, 5.113 y 5.114. Este contrato formaba parte de un acuerdo de cooperación internacional del Gobierno Español el cual incluía asimismo la rehabilitación de este material por parte de ATEINSA. Finalmente solamente se enviaron a Malí cinco coches motores y cinco remolques, siendo el resto canibalizados. Tres de los coches motores y dos de los remolques fueron modernizados en los talleres de Villaverde Bajo, mientras que los restantes vehículos fueron acondicionados en la factoría de Astilleros Españoles en San Carlos (Cadiz). En cualquier caso, el proceso fue extremadamente lento, ya que estos automotores Billard no fueron enviados al país africano hasta 1.988.
Al mismo tiempo que se procedía a la venta de los automotores Billard, se estudió también la posibilidad de venta de tres automotores Renault heredados por FEVE del antiguo Ferrocarril del Cantábrico, a su vez adquiridos en los años sesenta de ocasión en Francia. Finalmente esta opción no prosperó y fueron desguazados en Santander. Un caso a parte es el de un automotor Brissoneau et Lotz adquirido por el Ferrocarril de Santander a Bilbao de ocasión en Francia en 1.948 y adquirido en 1.984 por el ferrocarril turístico de Vivarais (Tournon- La Mastre) se trata del coche motor MCD-8 y de remolque Rc.-4.
Venta de automotores FEVE serie 2400 (Apolos) a Costa Rica.
La serie 2.400 de FEVE fue construida por Maquinista Terrestre y Marítima en 1.983. Estaba formada por composiciones triples de dos automotores encuadrando un remolque central, disponiendo uno de los automotores de un departamento furgón. Inicialmente la serie estaba compuesta por catorce unidades que en 1.985 se vería ampliada con una nueva subserie de quince unidades esta vez formada de dos coches motores sin remolque.
Con motivo de un acuerdo de cooperación entre el Gobierno Español y el de Costa Rica, se embarcaron en el puerto de Santurce, con destino al país centroamericano, dos composiciones de automotores de la serie 2.400 en Junio de 1.993. Se trataba de las unidades 2.412+5.452+2.462 y 2.414+5.464+2.464 que en Costa Rica recibieron los números 300 y 400 cada composición, indicando con las letras A, B y C si se trata de un coche motor sin furgón, un remolque intermedio o un automotor con furgón. Fueron desembarcados en el puerto Pacífico de Punta Arenas y se trasladaron de inmediato a la capital del país, San José. Su nueva propietaria, INCOFER, procedió a su adaptación al ancho de vía de 1.067 mm y a efectuar diversas pruebas con asesoría de personal de FEVE trasladado exprofeso. Algunos de los viajes de pruebas se efectuaron con las unidades decoradas en los colores originales de FEVE.
En principio prestaron servicio en la línea San José-Cartago (21 km.), donde debido a las fuertes rampas, se prescindió del remolque. Posteriormente fueron utilizados entre San José y Heredia (11 Km.) donde volvieron a circular con el remolque intermedio. En la actualidad, los ferrocarriles de Costa Rica se encuentran fuera de servicio, y por tanto también todo su material móvil, a la espera que culmine el proceso de su privatización.
Exportación de automotores MAN y Ferrostahl
La empresa Serveis Ferroviaris Mallorquins (S.F.M.) creada en 1.994 heredó un variado parque de automotores diesel procedentes de Feve, empresa que hasta la fecha había explotado la línea de vía métrica Palma-Inca. Una de las primeras acciones de la nueva sociedad pública dependiente del Gobierno Balear fue la adquisición de cuatro unidades diesel dobles, con los que se podría prestar el grueso de los servicios de la línea. Posteriormente, en 1.996 se contratá la adquisición de dos nuevas unidades que permitirían la total retirada del material móvil procedente de FEVE.
Es en 1.996 cuando se crea en Argentina la empresa Servicios Ferroviarios Chaqueños (SEFECHA), dependiente del gobierno de la provincia del Chaco. Con objeto de reactivar los servicios de viajeros en su abandonada red de vía métrica, la nueva empresa estableció contactos con los S.F.M. a fin de adquirir todo el material excedentario, llegando a un acuerdo de compra por valor de 150 millones de pesetas. En el contrato se incluía la venta de seis automotores Ferrostahl (Nº 2.002, 2.004, 2.005, 2.006, 2.019 y 2.027) y seis remolques (5.001, 5.003, 5.004, 5.005, 5.017 y 5.018) así como los automotores MAN bicabinas (viudos) 2.358 y 2.364 y tres automotores MAN dobles (2.334+2.354, 2.348+2.365 y 2.360+2.314).
El 6 de Abril de 1.997 partían con destino a Buenos Aires, a bordo del buque “Mira”, todos los automotores y remolques Ferrostaal de los SFM y los automotores MAN 2.334+2.354 y 2.348+2.365. Los automotores MAN 2.314, 2.358, 2.360 y 2.364 se han enviado a Argentina a finales de Octubre de 1.997.
Al llegar a Argentina, todo este material es trasladado por carretera a una empresa porteña, talleres Igarreta, donde son debidamente acondicionados. Respecto a los Ferrostahl, dado su deficiente estado, tan sólo se reconstruirán tres automotores y tres remolques, aprovechandose los restantes como repuestos.
Venta de material de los Ferrocarriles de la Generalitat de Catalunya:
Por el momento la última exportación de material móvil de segunda mano (Diciembre de 1.997) es el de ocho composiciones de Los Ferrocarriles de la Generalitat de Catalunya con destino a los ferrocarriles cubanos. Se trata de las populares “granotas”, utilizadas en las antiguas líneas de Sarriá y Catalunya. De ancho internacional y tensión de trabajo a 1.200 V.c.c., fueron construidas a partir de 1.944 de artesanía en los talleres de Sarriá. Al aprecer, cuatro de las composiciones son de cuatro coches y las restantes de tres. En la isla caribeña circularán en el antiguo ferrocarril de Hersey, única línea electrificada del país, que enlaza las proximidades de la capital, La Habana, con Matanzas. En la actualidad, el material utilizado en la explotación de esta línea es verdaderamente de Museo, contando con automotores Brill de los años veinte, directamente emparentados con los Brill de Catalunya. Asimismo cuenta con fantásticas locomotoras tranvíarias Baldwin e incluso con una locomotora diesel-eléctrica Brissoneau de origen francés (muy similar a las 307 de Renfe), que con un pantógrafo en el techo de la cabina ha sido transformada en locomotora eléctrica.
Salud
Juanjo Olaizola