He ido leyendo el hilo y aquí os dejo mi opinión
Es un tema en el que influyen muchos factores:
1) Quizá uno de los que más es la falta de trenes por las estaciones de los pueblos. Mi afición por los trenes ha venido porque mi padre me llevaba a ver los trenes a la estación de mi pueblo y en una tarde veíamos cantidad de trenes. Me encantaba ver los cruces de los mercancías, al jefe de la estación dando paso y por la noche con la linterna alumbrando las composiciones y un montón de movimiento de gente. Hoy todo eso se ha perdido. ¿Cómo puede un niño aficionarse al ferrocarril si en los pueblos los trenes no llegan y los que llegan lo hacen a cuentagotas? En mi caso ver los trenes de pequeño en la estación fue uno de los motivos que más me influyeron a la hora de tener gusto por este hobby, ¡si es que hasta recuerdo haber subido a la dresina que había en la estación y dar una vuelta con un amigo de mi padre que era ferroviario! Esas cosas se me antojan muy difíciles ahora.
2) Otro de los factores (y quizá con esto se resuelve el punto 1) es que podemos aceptar que actualmente haya pocos trenes y que no estén al alcance de los niños, pero dejando a un lado eso también influye mucho la educación que reciban los hijos. Si a tus hijos desde pequeños les estás dando un móvil/tablet para que se entretengan, mal vamos. Yo tengo 24 años y he convivido con la tecnología pero por suerte he disfrutado de mi infancia jugando con el tren eléctrico, el scalextric y con mis tractores de juguete. Depende mucho de cómo sea la educación de pequeño ya que a esa edad se van gestando los gustos. Estoy seguro de que si me hubiesen dado un ordenador, móvil o tablet de pequeño y me hubiesen preguntado por un Estrella ahora diría que es eso que hay en el cielo por la noche.
3) Falta de difusión, aunque creo que esto se puede corregir con las nuevas tecnologias con canales de Youtube, redes sociales, etc como bien comentaban por ahí arriba.
Por último lo del precio de los trenes no lo comparto porque a un niño sí que se le pueden regalar kits de madera con trenes bastante asequibles para que se pueda ir aficionando y a partir de ahí ir probando con un set de iniciación más profesional como los de Roco. A un niño está claro que no le vamos a regalar una loco de 200 euros porque se la carga