Aquí una explicación del ex-alcalde de St. Feliu, el original en catalán
https://jordisanjose.blogspot.com/2024/01/no-ha-pogut-ser.html?fbclid=IwAR2pxS_kJT3cAYmtBfa0-6Gd7cAmruf39dTVYdMBjYZAmdFwIl2A54ceEmcTraducido:
"Ayer, 11 de enero, comenzó la demolición de la estación de trenes que, con sucesivas modificaciones, ocupaba ese espacio desde 1854. Su conservación no ha sido finalmente posible.
Quiero hacer algunas consideraciones desde mi implicación como representante democrático de la ciudadanía entre 1991 y 2019 y como ciudadano con compromiso cívico y político desde 1973. Para realizar un resumen histórico con mi voluntad pedagógica habitual, pero también para desmentir que la ciudad ha sido gobernada democráticamente por personas ineptas o insensibles con el patrimonio.
1. La lucha ciudadana por el soterramiento es permanente y unitaria desde el final de la dictadura y los inicios de la Transición , con diferentes instrumentos y con intensidad variable, hasta la consulta ciudadana de noviembre de 2021.
2. El compromiso definitivo del Gobierno de España con el soterramiento se presentó públicamente en la Sala de Plenos del Ayuntamiento el 17 de enero de 2018 . Este compromiso del Gobierno culminaba décadas de movilizaciones y negociaciones, a lo largo de las cuales cabe destacar la redacción de dos proyectos ferroviarios: 2000 y 2010.
3. El proyecto presentado en enero de 2018 y actualmente en obras es el que se elaboró por encargo del Gobierno de España, con la colaboración de Generalitat y Ayuntamiento, en 2010.
4. Debido a las consecuencias de la crisis económica de 2008, el concurso de obras no se licitó inmediatamente después de la aprobación del proyecto. Más aún, en 2014 la Generalitat y en 2015 el Ministerio de Fomento intentaron dejar sin efecto el proyecto de 2010 y buscar alternativas más económicas para resolver estrictamente el paso a nivel.
5. En el contexto económicamente difícil y políticamente conflictivo de los años 2012-2017 el Ayuntamiento rechazó todo proyecto sucedáneo y defendió de forma contundente y plenamente unitaria el proyecto de 2010.
6. Tanto el primer proyecto de 2000 como el definitivo de 2010 preveían la supresión del edificio antiguo de la estación por sus propias características: materiales de obra muy débiles de mediados del siglo XIX, y cimientos incapaces de mantenerse en trabajos por debajo del edificio, ya poca distancia de los cimientos. Como he explicado a menudo, la profundidad de las obras es inamovible, ya que está determinada por el trazado de la Riera Pahissa y de la Riera de la Salut.
7. Ningún partido político ni ninguna asociación de vecinos o entidad de Sant Feliu en ningún momento de la lucha por el soterramiento ha planteado vincular (y mucho menos condicionar) la lucha por el soterramiento al mantenimiento de la estación. La plataforma Salvem l'Estació se constituye en 2010, una vez aprobado el proyecto y sin que hubiera presentado ninguna alegación ni propuesta en los meses que estuvo en exposición pública. Hubo movilizaciones por otros temas , pero no por la estación.
8. Tras la comparecencia del ministro de la Serna en la Sala de Plenos, se constituyó la Ponencia Unitaria del Entierro en mayo de 2018.
9. La Ponencia encargó a ingenieros externos (Área Metropolitana, Diputación y Ayuntamiento de Barcelona) la viabilidad de conservación de la estación manteniendo el proyecto de 2010. En 2018 se valoraron dos opciones: a) mantenerla durante las obras, b) desmontarla pieza a pieza para su posterior reconstrucción.
10. Según informaron los ingenieros, mantenerla era imposible porque los cimientos de la estación de 1854 no habrían soportado las obras del túnel que, viniendo desde la carretera de Sánson, viene a salir a la altura del viejo edificio .
11. Por otra parte, desmontarla era imposible porque la calidad de los materiales de obra de ese momento (básicamente, los ladrillos) no permitía separarlos individualmente y numerarlos para la reconstrucción de la estación con los sus materiales originales. Sin embargo, nada impedía la recuperación de algunos elementos (vigas, adornos,...) para su conservación o una posible reconstrucción.
12. La Ponencia constató en 2018 que para conservar la estación habría que realizar un nuevo proyecto que pusiera como premisa la conservación del edificio. Esto implicaría renunciar al proyecto de 2010 y volver a empezar de cero, algo que todos los partidos rechazamos unánimemente.
13. En junio de 2021 empezaron las obras del soterramiento!!!
14. Con las conclusiones que he explicado en los puntos 9, 10, 11 y 12, en julio de 2021 el pleno municipal aprueba por una amplísima mayoría (18 concejales de 21) una consulta ciudadana para definir cómo conservar la memoria de la estación, con una doble pregunta: a) memorial en un edificio nuevo; b) reconstrucción del edificio de 1854. No se planteó preguntar sobre la conservación porque, como he explicado en el punto anterior, implicaba volver a negociar desde cero.
15. Entre julio y septiembre/octubre de 2021, el PSC de Sant Feliu decide dar un giro de 180° en relación a la política unitaria sobre el soterramiento: en julio aprueba todos los aspectos de la consulta ciudadana, y en septiembre/octubre se carga todo lo aprobado dos meses antes y llama a la abstención. En otoño de 2021 el PSC puso punto y final a la unidad política para el entierro.
16. En noviembre de 2021 se realiza una consulta ciudadana ajustada en todo momento a la legislación catalana en vigor y con todas las garantías democráticas. El resultado fue que en la nueva estación exista un buen memorial de la vieja.
17. Tras el inicio de las obras y en el marco de la consulta, algunas personas plantean dos nuevas posibilidades de conservación de la estación: c) traslado del edificio entero, yd) recubrimiento de los cimientos de la estación con una técnica no planteada anteriormente.
18. Estas propuestas se presentan tarde, pero no mal. Se plantean pública y argumentadamente en el pleno municipal de julio de 2023 (nota personal: el único pleno al que he asistido desde que dejé de ser alcalde).
19. Estas propuestas o cualquier otra con el edificio todavía en pie y con las obras en marcha, habrían requerido, en mi opinión, tres requisitos imprescindibles: 1) predisposición del gobierno municipal y de ADIF y el Ministerio para valorarlas, siempre que no implicaran renuncia al proyecto de 2010, 2) asumir y explicar que cualquier cambio en obras en curso tiene una necesaria, difícil y larga tramitación administrativa, que afectaría al calendario del soterramiento, y 3) existencia de un marco unitario de trabajo para tomar los acuerdos que deba aprobar el pleno municipal.
y 20. No se ha dado ninguna de las tres condiciones expuestas en el punto anterior, y ninguna nueva propuesta ha sido valorada por las administraciones afectadas. Por tanto, las obras continúan sin ninguna revisión del proyecto de 2010 y, en consecuencia y como era conocido desde el principio, la estación ha sido demolida. Su conservación no ha sido posible.
No es motivo de alegría, ni de lejos. Pero tampoco debería ser motivo de frívolas e injustificadas acusaciones contra los cerca de 200 concejales y concejalas que nos han representado democráticamente en los últimos 45 años.
Ahora tocará velar por que la nueva estación sea digna heredera y mejore la vieja, y porque tanto durante las obras que quedan como en el proceso posterior de urbanización, se recupere al máximo un clima de unidad ciudadana y política que permita el mejor proyecto urbanístico para nuestra ciudad"