nacmusic escribió:
Se puede añorar una época que no has vivido? bueno, pues a mí me lleva pasando varios años...
¡¡Hombre!! Me alegra enormemente que alguien que no haya conocido el vapor, aunque fuera ya en su decadencia, sienta esa añoranza tierna y sentida. Los privilegiados (entre los que me cuento) que pudimos disfrutar de esas locomotoras negras, sucias, ruidosas, siempre maravillosas, y a veces escandalosas (que se lo pregunten a las mujeres), no podemos más que frotarnos las manos de satisfacción por haberlo hecho, es algo que ya nadie nos puede quitar aunque hoy en día nos quede lejos volver a disfrutar de ellas. Yo prácticamente me crié en el depósito de Salamanca, entonces un hervidero de máquinas que no paraba ni de día ni de noche. Desde casa olía a carbón, se veían las humaredas que dejaban y sus toques de silbato eran casi más familiares que las campanadas del reloj. Yo era un niño, sí, pero las vaporosas me podían y un maquinista amigo de mi abuelo se propuso quitarme "el vicio", como entonces lo llamaban, y me metió la cabeza en el hogar de una "mil" del Oeste, por ver si de esa manera aborrecía las máquinas. Pero el pobre Carragal (así se llamaba de apellido) fracasó de lleno. Hoy en día, después de 45 años, me gusta el vapor tanto o más que antes, pero me sigo emocionando al ver una locomotora de vapor y, sobre todo, oyendo su silbato. Tiempossss......