Buenos días.
En el número de diciembre de 1931 de la revista Ferrocarriles y Tranvías se publicó un amplio artículo sobre este tema, escrito por Antonio Mendoza, Jefe de la Oficina Técnica de Unificación del Material Ferroviario.
En este artículo, perfectamente documentado, se explica que a finales del año 1925, la Federación de Industrias Nacionales, con la participación del Consejo Superior de Ferrocarriles, se encargaron de trabajar en pos de la unificación del material ferroviario, precisamente por las múltiples incompatibilidades y problemas que se producían entre el material de las distintas compañías, además de lograrse un importante abaratamiento de los costes de fabricación. Los elementos a estudiar eran, por ejemplo, los rodajes, cajas de engrase, suspensiones, elementos de tracción y choque, (los topes ya son cuadrados), enganches, bastidores, frenos y tuberías...
Resultado de estos trabajos, fueron los diseños de vagones cerrados, bordes altos, bordes bajos, jaulas de dos y tres pisos, plataformas con traviesa pivotante, cisternas, foudres de una o dos cubas, todos ellos con y sin garita, y con bastidor de 6.500, empate de 3.200, y longitud entre topes de 7.700, siendo todas las medidas en mm.
Dos tipos diferenciados en sus medidas, aunque no en sus órganos, comunes con los demás modelos, fueron un tipo de plataforma para el transporte de automóviles, y un furgón para trenes de mercancías, cuyas medidas eran: bastidor 9.200, empate 5.500, longitud entre topes, 10.400, también siempre en mm. En este caso, la plataforma no tenía la opción de la garita.
Solo en los años 1927 a 1929, las Compañías Estado, Norte, MZA, Andaluces, Sur, Oeste y Villacañas a Quintanar, adquirieron un total de 6.981 vagones de estos tipos. Para que podamos hacernos una idea de las necesidades de aquella época, y con el fin de que podamos trasladarlo a nuestras maquetas, las cantidades de cada tipo eran las siguientes:
Cerrados sin garita: 2.721
Cerrados con garita: 1.366
Bordes altos sin garita: 259
Bordes altos con garita: 211
Bordes bajos sin garita: 859
Bordes bajos con garita: 401
Jaulas de dos pisos sin garita: 175
Jaulas de dos pisos con garita: 75
Jaulas de tres pisos sin garita: 35
Jaulas de tres pisos con garita: 22
Cisternas sin garita: 25
Plataformas con viga giratoria: 352
Plataformas de bordes abatibles: 380
Estas cantidades pueden darnos una idea de las proporciones de vagones en explotación, aunque se echan en falta varios tipos, como los cisterna con garita, o los foudres, aunque estos últimos pertenecían a las empresas privadas del sector, que disponían generalmente de series relativamente cortas, (aunque matriculadas en las Compañías ferroviarias), y es de suponer que fueran más reacias a hacer inversiones por unos problemas que no les afectaban. También es posible que, simplemente, no aparezcan en esta relación publicada en el artículo.
Respecto al escaso número de vagones cisterna, hay que recordar que por entonces el tráfico por carretera era aún muy escaso, y gran parte de las necesidades energéticas de la industria se dirigían al carbón y no a los hidorcarburos, incluyendo el propio ferrocarril.
Espero que con esto quede aclarado el tema de los topes cuadrados.
Saludos cuadrados. Digoooo.... cordiales.