Y pasó lo siguiente:
Yo. –Cariño, me he comprado un libro.
Ella. -¿De trenes?
Yo.- Esto… no… (primer silencio incómodo… prosigo…) que dice Angela Merkel que con la que está cayendo hay que ser previsibles y aprender.
Ella. -¿La mujer de Rajoy dice esas cosas?
Yo.- Con la que está casado no, es la otra.
Ella.- Y qué libro es?
Yo.- Que digo yo que con la que está cayendo hay que se previsibles y me he comprado el libro de “Es fácil aprender rumano si sabes cómo?
Ella.-
Yo.-No me mires así que con la que está cayendo hay que se previsibles… ¿no?
Ella.-Por curiosidad, ¿has comprado algo más?, es que se me hace raro que en navidades…
Y ahora es cuando se produce el silencio de los más incomodos conocidos y por conocer, con banda sonora de psicosis incluida.
Yo.- Estooooo… es que con la que está cayendo hay que ser previsibles y me he comprado ¡¡¡UN ACORDEÓN!!!
Ella.-¿QUEEE?, pero si hace tres años te compraste un guitarra y todavía no sabes ni tocar un acorde?. Más trastos en casa no metes o seré previsible y te va a caer un buena. ¡¡¡Que disgusto me has dado!!!, prefiero que te hubieras comprado un tren…
Yo.-
Continuará…