Con respecto al -supuesto- argumento a favor de la compra temprana basándose en el "disfrute" que produce ésta, quisiera hacer un apunte, ya que me parece un planteamiento cojo al omitir u obviar la existencia de la otra "pata". A saber: si bien es cierto que quien compró la 250 cuando fue lanzada al mercado la ha estado
disfrutando desde entonces, no es menos cierto también que quien no la compró, ha estado
disfrutando igualmente durante este tiempo del dinero que en su momento no pagó por ella.
Si consideramos que el dinero que dedicamos a la afición siempre acaba más tarde o más temprano (probablemente lo último) convertido en algún "juguete", estamos ante un juego de "ganancia cero": yo no adquirí la 250 analógica a 150€, y por tanto no he tenido el placer de
disfrutarla desde entonces, pero esos 150€ no duraron mucho en mi bolsillo -ríete tú de la eficacia de las campañas "pro-ahorro"

- y acabaron convertidos en parte de un vagón artesanal de latón, el cual sí he
disfrutado a modo de "compensación".
El presupuesto es el que es en cada caso, y para qué lo vamos a negar: siempre acaba "disfrutado". Luego, es ya cuestión de cada uno el decidir qué "fruta" prefiere y juzgar el grado de "madurez" más apetecible.
