JL440 escribió:
Desde Puerto de Navacerrada, descenso por el valle de Valsaín hasta enlazar en la estación de Segovia nuevamente con el fc. Villalba - Segovia - Medina del Campo, con las siguientes estaciones y apeaderos intermedios:
·Las Guarramillas (apd.)
·Camino del Paular (apd.)
·Venta de los Mosquitos (apd.)
·Balsaín (apd.)
·Real Sitio de San Ildefonso (estación)
·Buenos Aires (apd.)
·Segovia (estación)
·Segovia-Estación del Norte (estación)
·Segovia-Plaza del Azoguejo (estación)
Total: 28 km y 839 m desde la estación de Puerto de Navacerrada hasta la plaza del Azoguejo, bajo el mismísimo acueducto romano. El tramo entre Segovia-Norte y la plaza del Azoguejo iría, naturalmente, en túnel. Sobra decir que, de haberse ejecutado esta prolongación, uno podría ponerse "morao" de cordero y cochinillo en Casa Cándido y, sin tener que coger el coche, subir directamente a disfrutar del paiseja y el aire puro del puerto para hacer cómodamente la digestión.
Desde Los Cotos fue desde donde hubo más proyectos de prolongación, tres nada menos, la continuación de la línea, denominada como "Trozo 3º" y dos ramales. El Trozo 3 proponía un descenso por el valle alto del río Lozoya hasta la estación de Gargantilla-Lozoya, en la línea Madrid - Burgos, con un total recorrido total de 41'967 km y estaciones y apeaderos, entre otros lugares, en el pueblo de Rascafría y el Monasterio de El Paular. En cuanto a los ramales, como digo se proyectaron dos formando una Y, uno a la zona de Valdemartín (donde hoy se sitúa la estación invernal de Valdesquí, la más grande de todo el Sistema Central) y otro a las lagunas de Peñalara. El ramal a Peñalara fue prontamente olvidado, sin embargo sí se hizo hincapié en la ejecución del tramo 3º (Los Cotos - Rascafría - Gargantilla) y el ramal a Valdemartín, sin embargo estas obras sufrieron un ejemplo más de la burRocracia española: se redactó el proyecto correspondiente, se licitó y presupuestó, pero nadie se acordó de dar la orden de ejecución de las obras, por lo que el túnel de Los Cotos sólo se ejecutó en su vertiente segoviana, al pertenecer la otra boca al trozo 3.
Por último, parece que también se pensó en extenderlo desde Cercedilla hasta la estación de El Escorial, aunque en el libro de J. Aranguren no se cita.
En resumen, una gran cantidad de proyectos, lamentablemente sin haberse llevado a cabo, que hubieran permitido dotar de transporte ferroviario a zonas que, con climatología invernal adversa, quedan poco menos que aisladas. Con la Sierra de Guadarrama en puertas de convertirse en Parque Nacional, nadie se atreve siquiera a plantear la posibilidad de ejecutar alguno de estos proyectos, aunque somos muchos los que creemos que ejecutar el ramal a Valdesquí permitiría dotar a esta zona de un medio de transporte respetuoso con el medio ambiente. Es cierto que las obras de explanación provocarían daños en la vegetación del entorno, si bien creo que esto quedaría compensado ante la menor cantidad de coches y autobuses que cada fin de semana de la temporada de esquí saturan el aire y las carreteras con los humos del escape.
Un poco más y a lo mejor podría haber enlazado con los secundarios de Castilla