Alvaro440 escribió:
renfemadrid escribió:
No sé Carlos, yo lo veo al revés, para mi gusto son trenes bonitos, su confort es solo equiparable al de las 599, debido a la poca vibración que tiene el tren y a la velocidad a la que circulan, cierto que solo he hecho en ellos el Intercity veraniego Gandía-Madrid. Siempre iban a 140-150. Además los asientos están bastante bien, aunque deberían ser algo más mullidos. Para mi son igual de cómodos que los de los 470. ¿Caros? Pues claro que sí, la tontería de ser MD o Intercity encarece bastante el billete, aunque se equipara con el alto confort. Por cierto, buenos vídeos

Mayor confort ese "trasto" que una 470?
Pues no se a que te refieres con confort, pero yo no lo veo así, que diferencias hay (aparte del precio) con una 470? Yo cuando monté lo unico las mesas esas, pero con lo que se movía el tren no era recomendable utilizarlas... todo lo demás era igual o peor, lo bueno es el acceso a PMR, pero se podría poner en las 470 sin mucho problema si quisiesen...
Puede que sea mas moderno y que las 470 estén ya un poco "viejecitas", pero aun les quedan bastantes años para la jubilación...
S2
Si bien es cierto que no se puede decir que las 470 estén obsoletas, las 449 ofrecen unas condiciones mucho mejores y, lo más importante, propias de nuestra época.
Las 470 tienen una velocidad máxima de 140km/h, que no está mal para servicios regionales por líneas que no permitan desarrollar mayor velocidad, pero se quedan cortas en las que el límite es mayor, siendo el ejemplo más representativo los regionales Barcelona - Valencia. Este problema se ha corregido en los servicios en los que han sido sustituidas por unidades 449, como Madrid - Alcázar - Jaén / Albacete o Madrid - Venta de Baños - Vigo / León / Irún.
Los asientos de las 470 no pueden considerarse incómodos por si mismos, pero sí más incómodos que los de las 449, pues no son reclinables, ni tienen mesita, ni enchufe, ni el bolsillito para poner lo que quieras en el asiento de delante, ni reposapies, ni tanto espacio. A favor de las 470 hay que decir que su calefacción no sobresale de la pared, mientras que en las 449 sí.
Las 470 tampoco tienen acceso para PMR, ni pantallas que muestren información durante el viaje (los LED no son lo mismo), ni pasos entre coches por los que se puede pasar con maletas perfectamente, ni puertas de cristal entre el departamento de viajeros y la zona de las puertas, ni soporte para bicicletas, ni una estética moderna y actual, tanto interior como exterior. Tampoco olvidemos que a poca velocidad que cojan, las puertas de las 470 empiezan a moverse de tal manera y a hacer tanto ruido que parece que se vayan a abrir de un momento a otro.
Y no nos pongamos a hablar de costes de mantenimiento de las 470, su consumo de electricidad ni de que no devuelven electricidad a la catenaria.
No es que las 470 no ofrezcan buenas condiciones para viajar, sino que las 449 ofrecen unas condiciones muchísimo mejores y, ante todo, actuales, propias de nuestra época. El problema es que la mayoría de aficionados están tan apegados a estas unidades, con las que han viajado y a las que han fotografiado durante tantos años, que son incapaces de ver esta realidad, y yo también pensaba esto hasta hace no mucho, cuando me di cuenta de que no hay color entre los trenes de hace 30 años y los nuevos. Es cierto que las 449 tampoco son perfectas: las pantallas vibran y ya he visto paneles del techo algo desprendidos en algunas unidades, sus asientos podrían ser algo más mullidos y la calefacción podría no sobresalir de la pared, pero esto no quita que estén a años luz de las 470, y respecto a esas 432 tan aclamadas, nisiquiera están en la misma dimensión del espacio.
Respecto a las 449, he llegado a leer en internet críticas tan esperpénticas como que son peores porque sus transformadores los han montado presidiarios (por cierto, sus equipos vitales están duplicados, si se avería uno, la unidad seguirá funcionando con el otro), y en este mismo foro alguien dijo que, viniendo desde algún sitio de la mitad norte de España (que no recuerdo) a Madrid en una 449, tuvo que bajarse en una de las estaciones del puerto de La Cañada (que tampoco recuerdo) y coger un autobús "por la incomodidad del asiento", otro comentario decía que los asientos de la 449 no permiten movilidad porque "no puedes apoyar el brazo en el borde de la ventana", algo totalmente falso.
Qué decir de las críticas a la estética de las 449 y en general de cualquier tren que no tenga más de 20 años: que si son todos iguales, que si parecen "un supositorio", que si son... ¡demasiado blancos! Los trenes de hoy en día tienen que tener un diseño aerodinámico y moderno, y el 449 cumple perfectamente esos requisitos. A mi me encantan los trenes modernos, entre ellos las 449, si bien es cierto que cuando llevan la tapa del scharfenberg abierta son horribles. También es cierto que, de entre todos los trenes nuevos de Renfe, creo que tiene el diseño menos afortunado (por ese morro tan redondeado), pero no por ello deja de gustarme.
Lo que ocurre es que cuando un aficionado se entera de que van a cambiar a su querida 470 o 440R por una flamante 449 ya la etiqueta como la culpable de la desaparición de su tren, adopta una idea negativa preconcebida de que nada del mundo podrá igualarlo y busca un montón de fallos donde no los hay en el nuevo tren para autoconvencerse de que es horroroso. Yo creo que, al menos en parte, esto se debe a que la desaparición de una serie se considera sinónimo de su desaparición total, cuando no es así. No olvidemos que tenemos preservados un 593, una 432, una 444, una 440, un Talgo III, un Talgo IIIRD y varios coches de viajeros representativos de las series 9000 y 10000. ¿Podría haber más vehículos preservados? No hay duda, yo sobre todo echo en falta algún 8000 original. Pero tampoco podemos pedir, como hacen algunos, que se preserve una unidad con cada pequeña distinción o esquema de pintura. Algunos dirán que, de los trenes preservados que he mencionado con anterioridad, muy pocos están en estado funcional. Y es cierto, pero eso no quita que los demás estén preservados y puedan volver a ser funcionales. El que pocos funcionen es culpa exclusiva de la despreocupación de las autoridades por la conservación del patrimonio industrial y su consecuente falta de inversión. Lo que no puede ser es que, ante la falta de trenes históricos funcionales, se pretenda mantenerlos en servicio regular. Porque, si por alguno fuera, seguiríamos teniendo a las 440 con asientos de skay dando vueltas por Madrid con la denominación comercial de Tranvía.
Y, por cierto, ¿cuántos aficionados fotógrafos de los que ahora adorais a las 470 y 440R las dejábais pasar sin hacerles foto alguna porque estaban hasta en la sopa? Ya contesto yo, la gran mayoría. ¿Por qué lo digo? Porque ya estoy viendo a los que ahora aborrecen a las 446 llorar su pérdida cuando las saquen de servicio, así que mi consejo es fotografiar sin distinciones a todo el material, incluidos trenes Civia y AVEs, pues tampoco son eternos, ni estarán siempre en este estado, ni harán los mismos servicios. Otra pregunta, ¿cuántos aficionados desarían ahora tener más fotos con AVEs serie 100 en su antiguo esquema de pintura, habiéndolas ignorado totalmente cuando lo llevaban? Vuelvo a contestar: la gran mayoría. No olvidemos que, cuando la famosa fuelización de Renfe suponía la sustitución de las locomotoras de vapor por flamantes trenes diesel, los aficionados de la época despreciaron todo lo nuevo, y ahora lamentamos no tener más fotos de, por ejemplo, ferrobuses. O, en los años 80, muchos aficionados aborrecían la nueva decoración mazinguer, mientras que ahora todos los aficionados la recuerdan con nostalgia.
¿Y por qué esta parrafada para decir algo tan sencillo? Igual de simple que lo dicho hasta ahora. No podemos cometer los mismos errores que cometieron las anteriores. No podemos despreciar el ferrocarril que tenemos ni ignorar que es como es. No podemos encerrarnos en una burbuja, ignorar a los trenes nuevos y divinizar a los antiguos, que cuando eran nuevos eran a su vez ignorados por los aficionados de su época. Retratemos fielmente nuestro ferrocarril, el que nos ha tocado vivir, para que futuras generaciones tengan de él una imagen más fiel del que nosotros tenemos ahora de los trenes diésel que sustituyeron a las locomotoras de vapor, porque quién sabe lo que nos depara el futuro, tal vez dentro de no tantos años los trenes de alta velocidad decaigan en favor de monorrailes al igual que ahora el ferrocarril convencional decae en favor de la tan aborrecida alta velocidad. Por ahora, no sabemos si será así. Pero lo que podemos tener por seguro es que cuando lo sepamos, será demasiado tarde como para retratar el ferrocarril tal y como lo estamos viviendo.