JefeDeestacion escribió:
Otra pregunta un poco fuera de lugar: hay alguna diferencia entre los LX de Rivarossi y los producidos por Electrotren?
El modelo de Electrotren-Hornby, como ya han dicho los compañeros, es un mero repintado. Rivarossi reprodujo algún coche con rótulos en castellano y portugués, pero la mayoría de sus referencias eran de coches en la época en la que circularon por otros países. España recibió más o menos la mitad de los Lx después de su periplo europeo en sus mejores años.
Talgoryan, en el número 70 de Mastrén, el modelista José Ángel Barberá habla de cómo detallar los bajos de diferentes coches de la CIWL añadiendo el freno de vacío tan característico del parque español.
Para lo demás, y teniendo en cuenta que quieres obtener un Lx época IV después de la modernización, hay que echar mano de fotografías como la que has subido. Afortunadamente, los Lx han disfrutado de una fama bastante amplia, así que es una de las pocas series de las que contamos con fotos más que de sobra.
A grandes rasgos, las tareas serían las siguientes (aunque sí que es verdad que las modificaciones no fueron exactamente iguales en todos los coches):
Testeros: modificación de carboneras, eliminación de escalera de acceso al techo, añadido de las luces de cola españolas, galibó y mangueras de conexión eléctrica.
Lado pasillo: eliminación de los dorados en las ventanas.
Lado departamentos: Eliminación de dorados varios, pintura o detallado de las ventanillas translúcidas (en diferentes tonos de color parecido, nada que ver con el horroroso blanco que pone Electrotren en los baños de los 8000es).
Nuevas inscripciones: los Lx fueron muy escuetos en rotulación, incluso en época UIC, por fortuna para nosotros. Lo más destacado es el rótulo corto de la CIWL sobre las ventanas.
Ensuciado general y envejecimiento notable: los Lx tenían 50 años de vida activa a finales de los 70, y se notaba. Y a principios de los 80, no digamos. Hay numerosas fotografías de coches con una chapa no muy sana, que digamos.
Si te animas, puedes modificar los testeros de alguno, precisamente los que cambiaron los fuelles por los burletes de goma.
Saludos
Carrington, que un día espera reformar un LX de esa forma.
Al parecer, talibán de la explotación ferroviaria a escala. A pesar de eso, me gusta un buen plato de spaghetti. De los de verdad.